martes, 17 de septiembre de 2013


Hay algo de pacífica quietud
en lo que no se queda quieto,
en lo que siempre anda buscando,
en lo que siempre está imaginando,
… intuyendo.

A veces temo alcanzar mis metas,
hacer realidad mis ilusiones,
pues temo perder también la ilusión
de pasarme las noches en vela
imaginando alcanzarlas.

A veces temo que un día me ames
porque entonces ya no podré
levitar mirando a la Luna
al soñar que te tengo.

A pesar de eso no me importaría
tener que dejar de soñar,
pero un hada me ha dicho al oído
que eso es algo que no ha de ocurrir,
que no sueñe más.

Puedo continuar soñando.

(Tano)

1 comentario:

Huellas dijo...

Dicen, que los poetas nunca podrían tener a su amada y ser felices porque es deseo lo que hace que brote la musa que hace vibrar las almas.

Hermoso deseo Tano.