¿Para que sirven mis manos,
si sus dedos no te pueden recorrer?.
Las donaré a los gusanos
diciéndoles que se las pueden comer.
¿De que valen los manjares,
si los labios me sellaron a traición?.
Se secaron los rosales,
las espinas quedan en mi corazón.
¿Para que quiero la Luna,
si tu hermosura no ilumina ya?,
si ya no alumbra la espuma
que te salpica al ver romper el Mar.
¿Para que quiero hacer versos,
si ya no te los puedo regalar?,
si ya no puedo esconderlos,
bajo tu almohada, a la hora de acostar,
en ese lugar secreto
donde mi corazón suele reposar.
¿Para que hacer poesías,
si a mi Niña ya no le van a llegar?.
No “todo será armonía”
ni “las estrellas nos mirarán pasar”.
¿De que me sirve mi pluma,
si mi cabeza no quiere pensar?.
Los versos de Amor se esfuman,
tan solo azufre puedo vomitar.
¿Para que quiero los besos,
si tú no me besas ya?.
Me sobran tantos abrazos,
no me logran calentar.
¿Para que quiero el amor?
¿Para que quiero la Vida?
Maldigo la Poesía,
que ahora suda dolor,
solo desprende calor
si es para ti, VIDA MIA.
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