Tus ojos y tu pelo,
tu mirada y tu sonrisa,
tu forma de aprenderme
y tu forma de enseñar;
tus versos alocados;
tu mirada y tus “te quiero”.
Tus ases en la manga,
tus adioses,
tus “de nuevo”,
tus cambios de registro,
tus susurros tan cercanos
y tu voz llovida desde el cielo.
Tus flores y tu patio,
tus trazos de lapicero,
tus llamas y tus aguas,
tus cosas por el suelo,
nuestras charlas en la noche
y esa rotunda redondez
de tu trasero. …………
………
Estas perlas que enumero
son los dientes afilados
del feroz perro de presa
que me come el corazón.
(Tano)
1 comentario:
Tus flores y tu patio,
tus trazos de lapicero,
tus llamas y tus aguas,
tus cosas por el suelo,
nuestras charlas en la noche
y esa rotunda redondez
de tu trasero. …………
Siempre, siempre, es un placer leerle señor.
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