Enviaré mensajes en
mis cartas,
confusos,
con dobles sentidos,
o sin sentido si nada siento,
pues no tendrá sentido enviarlos
sin nadie para recibirlos.
Inventaré imágenes
absurdas
pues absurda es mi imaginación,
en las que tu luz no aparezca
para no alimentar la pena
de imaginarte a mi lado
apoyar tu cabeza en mi costado,
yo,
besando tu melena,
velándote hasta que amanezca.
Contemplaré absorto
el horizonte
aunque el Sol queme mis retinas,
pues las largas noches de Luna
cicatrizarán la herida;
después de muerto el dolor
será mejor
quedarme ciego,
no poder mirar más cuerpos
si el suave perfil del tuyo
yo no puedo recorrerlo.
6 comentarios:
Los mensajes que se envían para nadie, son los mejores de todos.
Envíamelos a mi.
Lo malo es que si te los mando a ti, TECLA, lo mismo te desilusionan, pues ya no serían para nadie, jajaja.
Bueno, de todas formas me arriesgo y te mando uno en forma de un gran beso.
Más de ternura en mensajes de película, aunque la realidad sea dura, perdurará la esencia.
Mas cariños te envío
La buena esencia, ANA de mis entresedas, aunque sólo parezca que se trata de una gota lo que te has echado, perdura en la piel y en la pituitaria, para bien o para mal. Así debe ser, pue si no lo fuera nuestra robotización estaría en un plano avanzadísimo.
Muuuuxuak
-¿Hay algo más hermoso que un hombre? (Lo hay, ese es el hombre poeta)
-¿Algo más hermoso aun, lo habrá?
(Por todos los santos, lo hay. Tenga que ser el poeta amante)
Haces que una mujer, al leerte, tenga que ser más femenina, más musa, más objeto celeste de lo nunca consiguió ser.
Mas besos.
No me eches a mi la culpa, amiga SETE, hay mujeres que sois muy femeninas, muy musas y muy sujetos celestes sencillamente porque lo sois, y hombres, que como yo, nos aprovechamos de ello para inspirarnos y ser capaces de escribir un poema.
Para quedar por encima, un beso más de los que tú me evías.
Publicar un comentario