Se disfrazan de
“te quieros” los cebos utilizados para capturar el pescado que engorda la
vanidad egocéntrica al artista pardo de salón.
Agua, viento y
frío, … no brotan tiernos pesebres entre las esquinas de piedras y orines
ninguneados por el brillo de los gigantes de cristal; solamente las toses
sifilíticas en los cuchitriles de cartón empapado delatan al “belén” que adorna
las aceras.
Hoy mi Luna no
aparecerá por aquí, … correcta decisión, hay escenas purulentas en las que no
deseo que ella sea la primera dama, ni tan siquiera testigo; escenas en las que
tan sólo yo no desentono.
No soy fácil de
engañar, la hipocresía ya no me asusta, sólo me entristece, … y la soledad y el
miedo a la muerte son las únicas emociones que me mantienen vivo.
Debe ser que
todavía soy capaz de amar contra la lógica y con la consciencia de que la pared
siempre será más dura que mi cabeza, ... putos sentimientos los míos, ...
benditos sean.
¡A sangrar!.
(Tano)
12-2013
1 comentario:
La otra cara de la luna Tano, la que más brilla en la oscuridad de los corazones sensibles y presentes.
La que puede que no de suficiente luz pero al menos no es artificial.
Que los cartones no se humedezcan con las lágrimas de los que sólo comparten el vino del tetrabric. Brindo por ellos y por la miseria que habita en los hogares ajenos al frío de las calles, para que entre la conciencia, ya que no entra la caridad.
Un abrazo
Ana
Publicar un comentario