sábado, 2 de julio de 2011

SE FUE



Se resquebrajan las baldosas de las aceras
amenazando abrir en canal
el yeso muerto de las paredes
que antes lucieran añejas, pero bellas.

 En los balcones cuelgan
macetas de cáscara despellejada
pobladas de malas hierbas,
donde ayer las flores mandaban
señales a un cuerpo denso
repleto de ideas y locos sueños.

 Olvidaron el son los cantores callejeros,
nada les motiva para agarrar la guitarra,
nada les mueve a gritar la tonada.

 A calentar otros fríos había partido su Hada,
que por lamer humedades y cerros,
abandonó la castiza barriada.

4 comentarios:

Alma V dijo...

Ay Tanito! esta voz del que se queda, me llega. El complemento de aquella vida llena de colores luminosos que hoy se vuelve de gris resquebrajado... Hermoso!

Tano dijo...

Tengo varios poemas sobre este tema, mi ALMA. Como cambia el aspecto de los lugares y las escenas en función de la situación y del estado de ánimo del observador.
¡Besazos madrileños!

Huellas dijo...

Delicioso canto a la ausencia. Qué verad es esa, el color se vuelve blanco y negro cuando el alma se entristece.

Besos

Tano dijo...

Querida ANA, me alegra enormemente ver que lees pasadas publicacones mías. También me sirve a mi para recordarlas y verlas desde la perspectiva que da el tiempo. Algunas que no me parecieron en su día demasiado buenas las veo mejores, y viceversa, es curioso. Esta la veo por un estilo, la verdad, jajaja.

Fue dedicada a una amiga que dejó su barrio para irse a vivir a otro lugar.

Muxuak muxuak muxuak......