Mi alma,
un ovillo ensimismado con un cabo colgando
en el deseo de que los dedos de un lirio de agua
decidan deshilvanarlo.
¿Quién puede dudar
sabiendo que el mundo es una duda en sí mismo?.
¿Quién puede vivir en sombras
sabiendo que el mundo vive
en la sombra del faro del nenúfar de silencios?.
Faro … nenúfar … único y efímero universo,
universo en silencio.
Mientras la lengua de la brisa recorra la piel de mi piel,
la piel de mi corazón continuará buceando
junto a la piel del único pez irisado del cardumen gris.
Hay un vaso de absenta para brindar en la sima
y unas arenas doradas para dormitar
con la cabeza del error adecuado apoyada en mi hombro.
Sin lujos, sin apremios
… el reposo del mercenario desertor.
(Tano) 11.7.15